Los colores de los Derechos Humanos

La Facultad de Bellas Artes de la UCM, con el concurso "Los colores de los Derechos Humanos", impulsa a través de las diferentes representaciones artísticas los valores de los Derechos Humanos.

Elena Blanch González Decana de la Facultad de Bellas Artes. Universidad Complutense de Madrid.

"Los artistas sabemos bien cómo los colores marcan nuestra obra plástica y lo hacen por su capacidad de actuar sobre el nivel emocional. Por eso me ha parecido muy acertado el título dado a este concurso y a la exposición que se nos muestra como colofón del mismo. El trabajo de los meses de atrás ha concluido recopilando una inmensa colección de dibujos y pinturas elaborada por niños de todo el mundo. Niños y adolescentes entre 10 y 14 años han interiorizado, en ese periodo, algunos de los 30 derechos que la humanidad acertó a plasmar en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que acaba de cumplir los 70 años. Las creaciones se han centrado en la representación de alguno de los derechos o de personajes relacionados específicamente con ellos o con su defensa. La muestra nos provoca un vértigo especial porque son un grupo de obras escogidas entre las más de 17.000 creaciones producidas por nuestros niños, en más de 70 países diferentes. Aquí tan solo vamos a poder disfrutar de 40 de ellas que, adentrándose en nosotros y tras descansar unos instantes en nuestras retinas, incorporará a nuestro acervo sentimental una imagen de color y plasticidad del sufrimiento y la injusticia humana. Y, cómo no, una vez más el arte… El arte recuperando su papel de comunicación y expresión de los más íntimos sentimientos… La simplicidad de los más pequeños es la que nos vuelve a provocar la defensa de aquellos derechos abrazados por todos hace 70 años. Hoy, hemos de comprometernos y volver de nuevo a reivindicarlos con pasión, frente a los peligros y amenazas que se ciñen sobre ellos. La Facultad de Bellas Artes siente una mezcla de orgullo por albergar esta muestra, junto con un hondo sentimiento de trascendencia y estremecimiento por los 40 gritos de las composiciones de los más jóvenes. Gritos que, al atravesar nuestras almas, se transforman en un alarido ensordecedor que se fundé con la pasión de nuestros estudiantes para confluir, al unísono, en un grito de denuncia. Escuchad… Todos gritan juntos. Un alarido de protesta, de compromiso y de solidaridad. Solidaridad con los millones de personas que hoy sufren la agresión de sus derechos humanos".